El pasado 01 de diciembre, el Ing. Alejandro Marchionna Faré, actual Secretario del IGEP, participó como orador en la Jornada de Auditor Sostenible organizada por el Instituto de Auditores Internos de Argentina (IAIA), en el marco del convenio entre ambas instituciones.

Alejandro comenzó su presentación con el “CREDO”:
El Directorio no está para hacer Auditoría.
Su función es el Oversight: observar y sugerir mejoras en los procesos y los resultados, tutelar la cultura, perseverar en el propósito y la visión de la compañía.
El Directorio tiene que usar el input de Auditoría Interna para integrarla a sus mecanismos de observación y evaluación del equipo ejecutivo.
El Directorio debe hacer el control estratégico con información objetiva y ejercer su función de Oversight.

Continuó su disertación comentando sobre el “nuevo Triunvirato” (Environment, Social y Governance), el inversor responsable y el Directorio y la Auditoría Interna ante ESG
Por supuesto, presentó la relación de ESG con el mercado de capitales, a través de las siguientes afirmaciones:
En investigaciones realizadas, los activos intangibles comprenden un porcentaje creciente del valor futuro de la empresa.
Los conceptos de ESG se han generalizado en el mercado de capitales de los países desarrollados.
Sube el número de inversores interesados en la sustentabilidad y el impacto social de una empresa.
MSCI y S&P incorporan el análisis de riesgos y oportunidades en ESG a los factores financieros para la toma de decisiones de inversión.

No sin dejar de mencionar algunas críticas:
En el mundo desarrollado se argumenta que los algoritmos propuestos son demasiado complejos para entender con claridad el impacto de la empresa sobre el triunvirato.
The Economist ha sugerido que las empresas se concentren en parámetros de efecto ambiental.
En países en desarrollo, la objeción pasa por la necesidad de enfatizar sólo algunos aspectos de lo Social y de Gobernanza.
En Argentina, se pasan por alto aspectos tan fundamentales como la transparencia y el cumplimiento de lo impositivo…

Respecto a las Estrategias de inversión en mercados, señaló los siguientes puntos:
Selección positiva: el inversor elige invertir ya sea por valores de indicadores ESG o por ser best-in-class.
Activismo: voto estratégico de los accionistas sobre un tema en particular o para cambiar la gobernanza.
Compromiso: diálogo activo entre accionistas y ejecutivos para avanzar en algún tema ESG.
Consultoría: inversores se reúnen regularmente con los ejecutivos para intercambiar información y actuar como “alarma temprana” sobre riesgos posibles.
Exclusión: evitar inversiones en sectores o empresas por temas ESG.
Integración: incluir riesgos y oportunidades ESG en el análisis tradicional de valor financiero del equity.

Y en cuanto a Directorio y la Auditoría Interna ante ESG, y antes de adentrarse en la temática, recordó que su padre fue auditor interno, auditor externo y síndico en los años 60 y 70 y que siempre lo vió analizando números. Pero ahora…

No alcanza con mirar riesgos financieros y contables.
Tampoco es suficiente detectar riesgos del negocio y de la operación.
La empresa de 2023 tiene un claro impacto en el ambiente.
Todos le reconocen un manifiesto rol en la creación de valor.
Y miran al interior de la empresa con el ojo crítico con el que los ciudadanos observan al sistema político…

Más de una empresa se ha topado con barreras ESG infranqueables para desarrollar sus negocios.

Para concluir, alertó respecto a la ampliación de mirada, tener una perspectiva mucho más abarcativa, gestionar temas nuevos del entorno de la empresa, así como los aspectos más “soft”, todo en aras de convertirnos en los Leonardos del siglo XXI.

*Graciela Braga es socia del IGEP y miembro de la Comisión Directiva del Instituto de Auditores Internos de Argentina - IAIA.