El período 2024-2025 representa una etapa de transición y ajustes sensibles para las empresas argentinas ante un nuevo escenario. El año 2024 estuvo marcado por un contexto de austeridad y desafíos macroeconómicos, mientras que 2025 se proyecta como un periodo de recuperación y prosperidad moderada, como lo indicamos en nuestra nota de abril de este año. Los aprendizajes de este ciclo son esenciales para los directorios empresariales, que deberán implementar estrategias adaptativas y sostenibles para garantizar su competitividad en un entorno incierto, ante una economía y un mercado en apertura. La geopolítica sigue siendo tan importante como la economía, principalmente para el sector exportador y el sector importador.

Análisis del desempeño en 2024

Contexto macroeconómico

En 2024, la economía argentina enfrentó un escenario dual. Por un lado, la implementación del Plan Caputo consolidó el superávit fiscal durante diez meses consecutivos, un logro destacado que fue complementado por un blanqueo exitoso que incrementó las reservas internacionales. Sin embargo, persistieron vulnerabilidades estructurales, como el déficit en cuenta corriente, que promedió USD 1.3 mil millones mensuales, y las tensiones en el tipo de cambio, lo que dejó a la economía expuesta a posibles fluctuaciones financieras.

El índice de inflación mensual cayó por debajo del 3%, marcando el nivel más bajo en tres años. Este avance fue acompañado por una mejora en la confianza del consumidor, lo que señaló una recuperación gradual del clima social y económico.

Clima empresarial

En el ámbito corporativo, las empresas experimentaron una contracción en ventas y producción, lo que forzó una reestructuración estratégica basada en la reducción de costos y la mejora de procesos. Herramientas de gestión y mejora como las comentadas al inicio de esta nota fueron fundamentales para mantener la eficiencia operativa y el resultado positivo.

Además, la digitalización y la automatización comenzaron a consolidarse como pilares estratégicos en sectores clave, como el automotriz y el industrial, facilitando la preparación para una recuperación de la demanda esperada en 2025.

Proyecciones y desafíos para 2025

Perspectivas macroeconómicas

El panorama para 2025 es optimista, con un crecimiento proyectado del Producto Bruto Interno (PBI) del 5% y una reducción de la inflación anual, que según el REM, estaría cercana al 90%, y otros economistas indican que desaceleraría a un ritmo del 30% anual (OCDE). Estas condiciones, junto con la esperada eliminación gradual del cepo cambiario (en mi opinión tras las elecciones de octubre), impulsarán la inversión y el consumo interno. El mercado automotriz, como ejemplo representativo, se espera que alcance un volumen de ventas de más de 500,000 unidades según las fuentes de esta industria, lo que refleja un dinamismo renovado en la economía argentina. Este crecimiento estará apoyado por el incremento del PBI antes comentado.

Claves estratégicas para los directorios empresariales

1. Sostenibilidad y ética corporativa: Las empresas deberán integrar prácticas sostenibles y éticas en sus cadenas de valor para atraer a consumidores cada vez más conscientes de las implicancias sociales y ambientales de sus decisiones de compra.

2. Transformación digital: La adopción de tecnologías avanzadas, como inteligencia artificial y automatización, será crucial para optimizar procesos y mantener la competitividad en un mercado en apertura.

3. Gestión del talento y cultura organizacional: La retención y el desarrollo de talento adaptativo serán esenciales para navegar en un entorno de transformación acelerada. Metodologías como Jishuken seguirán siendo relevantes para fomentar una cultura organizacional ágil y resiliente.

4. Flexibilidad operativa: La capacidad de adaptación rápida a los cambios en la demanda será un diferenciador clave. Invertir en tecnologías y sistemas flexibles permitirá a las empresas responder eficazmente a las fluctuaciones del mercado y a su vez hacer rendir sus gastos en capital (Capex) y proteger su ROIC.

Prepararse para el Futuro

El 2025 ofrece tanto desafíos como oportunidades para las empresas argentinas. Mientras que las condiciones macroeconómicas se estabilizan gradualmente, las empresas deberán priorizar la innovación, la sostenibilidad y la tecnología como pilares estratégicos para garantizar su crecimiento y competitividad a largo plazo. Los directorios empresariales tienen la responsabilidad de liderar esta transición con una visión integral, alineando sus decisiones con las necesidades de competitividad y expectativas del mercado local y global.

 

Referencias

- Reilly Grant, E. (2024). Nota IGEP_ERG_abril2024.
- The Economist. (2024). Entrevista con Javier Milei, presidente de Argentina. https://www.economist.com
- La Nación. (2024). Las tres claves para las marcas en 2025. Guillermo Oliveto. https://www.lanacion.com.ar
- Camino, Mariana. (2024). Cómo impacta la crisis y perspectivas para 2025. Forbes Argentina. https://www.forbesargentina.com
- Fondo Monetario Internacional (IMF). (2024). Perspectivas económicas para Argentina. https://www.imf.org/en/Countries/ARG
- OCDE (OECD) Economic Outlook: Global growth to remain resilient in 2025 and 2026 despite significant risks. https://www.oecd.org/en/about/news/press-releases/2024/12/economic-outlook-global-growth-to-remain-resilient-in-2025-and-2026-despite-significant-risks.html